Amando
Con diecinueve años pierde a su padre, con lo que se queda sola y desvalida.
Sus fracasos en todos los terrenos van formando su personalidad, convirtiéndola
al fin en una mujer ambiciosa. A pesar de ello, Betina acaba ligada en un
matrimonio que le exige obediencia y sumisión. Poco a poco aprenderá a
reconocer sus muchos valores y a no resignarse a encajar más derrotas.